En 1974, en el momento más álgido del socialismo en la República Checa, nace Honza, el primer hijo de la pareja formada por los jóvenes Jana y Petr. En ese momento, la familia vive en Praga, en una habitación en la casa de la madre divorciada de Jana pero, pronto se mudan a Liberec donde encuentran una pequeña casa en el campo y donde nacen las dos hermanas de Honza. Mientras Petr empieza a escribir un diario familiar, la cámara de Helena Třeštíková filma los principales acontecimientos de la vida de esta familia y los confronta con los acontecimientos políticos y sociales más relevantes del país, como la caída del socialismo estalinista o la entrada en la Unión Europea. Třeštíková sigue filmando a la familia durante 37 años y el resultado es una vibrante crónica de cómo ha cambiado la sociedad checa en las últimas cuatro décadas.

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