De Grecia a China, un viaje alucinante por la ruta del mármol. Una reflexión con humor sobre la autenticidad, la tradición y la absurdidad de la economía global.
Bloques de mármol extraídos de una cantera de Grecia viajan en barco a China para ser convertidos en esculturas y columnas de estilo griego por los hábiles artesanos chinos. El mármol sobrante se transforma en pequeños souvenirs con imanes de nevera y son enviados de vuelta a Grecia para venderlos a los turistas chinos. El cineasta Sean Wang construye una memorable epopeya con un poder visual exasperante. Un viaje alucinante por la ruta del mármol, divertido y revelador. Una reflexión con humor sobre la autenticidad, la tradición, las relaciones internacionales y la absurdidad de la economía global.