Tolyatti, viejo símbolo del orgullo socialista, es hoy el Detroit ruso. En este entorno sin futuro surge el Boyevaya Klassika, un movimiento que rescata los icónicos Lada de la fábrica de coches de la ciudad para transformarlos en un medio de rebeldía y expresión de la desesperación de la juventud. Seguimos a Slava, Misha y Lera durante el año que tienen que enfrentarse a la edad adulta en una ciudad carente de esperanza. Laura Sisteró captura el espíritu de una generación que derrapa sobre el hielo con los viejos Lada convertidos en coches de carreras. La potencia estética y sonora del film transmite el malestar de los jóvenes de Tolyatti con olor a gasolina.
Proyección y coloquio con la directora