Nik Voigt es un cineasta versátil. Comenzó su carrera como fotógrafo documental, donde aprendió el arte de entrelazar personajes, eventos, lugares y temas en obras de gran belleza. Impulsado por su pasión por la narración visual, Nik decidió entrar en la producción de documentales. A pesar de tener una dilatada experiencia en la dirección de videos publicitarios, películas corporativas y cortometrajes, el verdadero debut como director de Nik en el ámbito de largometraje documental llega de la mano de Magic Mountain. La película es un testimonio de su creatividad y talento, y muestra su habilidad para capturar la esencia de sus protagonistas en la gran pantalla.